viernes, 27 de mayo de 2011

La distribución de las Cactáceas en Sinaloa





Las cactáceas son nativas del Continente Americano, así por ejemplo, Opuntia fragilis (nopal) se encuentra en el norte de las provincias de Columbia Británica y Alberta, en Canadá, mientras que otras especies brevemente columnares, cilíndricas o ligeramente globosas como Astrocactus spp. Y Prerocactus spp. Habitan en la Patagonia, en Sudamérica; pero también pueden encontrarse en las islas Galápagos y las Antillas.



Con cerca de 2,000 especies, esta familia vegetal se ha diversificado en los principales ambientes naturales de América, desde las regiones tropicales y subtropicales, como lo son las selvas altas perennifolias, en donde crecen especies de Rhipsalis, o las selvas medianas o bajas caducifolias donde se pueden encontrar algunas especies de Mammillaria; pero la mayoría de las especies de distribuyen en las regiones áridas y semiáridas (y subtropicales), donde se conoce más del 70% de las especies y disminuyen considerablemente en aquellos desiertos con condiciones climáticas extremosas.



México alberga una significativa diversidad de cactáceas, a nivel genérico (54) y específico (aproximadamente 750). Esto representa la mayor diversidad florística conocida para los países americanos. Su reconocimiento ha sido posible gracias a los estudios taxonómicos y los inventarios cacto-florísticos, los cuales presentan información necesaria sobre su distribución. En gran parte del territorio mexicano ha diversificado 4 tribus taxonómicas: Cactacea, Pachycereeae, Echinocereeae, quienes tienen su mayor representatividad en las regiones áridas, semiáridas y subtropicales del centro y norte de México, así como Hylocereeae, quien tiene su centro de diversidad en el sur de México y Centroamérica.



En el desierto Chihuahuense, el Desierto Sonorense y los valles intermontanos de Hidalgo y Querétaro existen cerca del 60% de los géneros considerados para México y de ellos cerca del 25% son endémicos; en relación a las especies, cerca del 44% de las cactáceas mexicanas son nativas de esta extensa región, de las cuales posiblemente más de 400 son endémicas. El estado de Sinaloa tiene cerca de 1,500 especies de plantas vasculares, pero posiblemente la cifra cambie en las próximas décadas gracias a los estudios que realizan botánicos de la Universidad Autónoma de Sinaloa. Las primeras contribuciones realizadas para conocer las cactáceas de Sinaloa. Las primeras contribuciones realizadas por el insigne González Ortega, quien recorrió el estado y registró más de 7,000 ejemplares de herbario, contando entre ellos registros de 44 especies de cactáceas nativas. Por su parte, Sánchez-Mejorada, quien fue un gran especialista en cactáceas mexicanas, reportó 67 nombres específicos para el estado. Gracias a los estudios que realizan actualmente diversos botánicos, principalmente de la Universidad de Sinaloa y el Instituto Tecnológico de Los Mochis, podemos señalar la presencia de cerca de 56 especies.



Las cactáceas arborescentes pertenecientes a la tribu Pachycereeae, están representadas por cerca de nueve especies, entre las que podemos citar a Pachycereus pecten-aboriginum (echo), Stenocereus martinezzi (pitayo) y Stenocereus montanus (pitayo). La tribu cactacea está representadas por cerca de nueve especies, donde están incluidas las cactáceas esféricas o mejor conocidas como biznagas; este grupo taxonómico muestra un elevado número de géneros y una amplia diversidad de especies con significativo nivel de endemismo, entre algunas especies se encuentran Ferocactus schwarzii, Mammillaria bocensis, Mammillaria guillauminiana, Mammillaria standleyi. Algunos géneros de tribu Echinocereeae, como Echinocereus (cinco especies) y Peniocereus (cinco especies), también corresponden a cactáceas representativas de Sinaloa. La tribu Hylocereeae también tiene representantes en Sinaloa, como Hylocereus ocamponis y Selenicereus vagans. Aunque la mayor parte de los géneros se encuentra en bosques subhúmedos, como los arriba señalados, algunos más habitan en los bosques fríos localizados sobre las cadenas montañosas como Heliocereus schrankii.



(Bravo-Hollis & Arias, 2002)